Un futuro improbable

(Óscar Sancho Nin, "Matrimonio")

No espero ya que esperes
mimos pluscuamperfectos
abrazos en tormentas torrenciales
ni besos de tornillo,
pero, ya ves, qué cosas me suceden,
resulta que te escucho y me conmueve
oírte hacer la lista
de todos tus proyectos
de ésos que no se cumplen casi nunca
(si un día tenemos pasta…
cuando nos sobre el tiempo…)
y que sin darte cuenta,
casi como ignorando mis defectos,
me incluyas en tus planes,
a muchos años vista,
contigo en tu futuro,
tan tuyo, tan dudoso.

Moras

No me siento yo con ganas de entrar a discutir si se debe permitir vestir el velo en el aula a las estudiantes musulmanas. No tengo ganas, ni capacidad intelectual; pero sí quiero entresacar de este batiburrillo que varias compañeras, correligionarias de la estudiante castigada, acuden al centro tocadas con velo porque quieren solidarizarse con ella, porque entienden que se la discrimina y porque "somos musulmanas" (cierto es que una vez en el interior del centro se "desvelan" ya que: "las normas son las normas y hay que cumplirlas")

Esas jóvenes han decidido ir a clase con el velo y saben por qué, tienen muy claros sus motivos. Mientras, las autoridades españolas (consejos escolares y administraciones públicas) no tienen muy claro si se debe permitir o no el uso del velo en las aulas y, lo que es peor, por qué razones prohibirlo o por cuáles permitirlo. Por otro lado, los estudiantes argumentan: Si nosotros no podemos llevar gorra (de béisbol, imagino), tampoco ellas deben llevar velo.

Tumor

A J. le operaron hace unos días de un tumor. Esperan, a día de hoy, recibir los resultados del análisis anatomopatológico y de un TAC que también le han hecho.

Hablo con él hace muy poco y no sé muy bien qué preguntar (¿Qué tal ha ido todo? ¿Cómo te encuentras?... lo de siempre). Se le ve preocupado, parece ser que los cirujanos dieron una primera impresión que no es mala: "Masa compacta, sin ramificaciones", pero insiste: "En unos días nos dan los resultados"

¿Cómo le sentará a una persona de este tiempo, de estos días de máquina y materia, decirle que rezarás por él? ¿Le asustará más?

Prefiero no decirle nada y rezar, claro.

Campaña dorsiana

Este modesto, modestísimo, blog se suma a la campaña promovida por Don Miguel d'Ors en sus nuevas Virutas y difunde el lema:

"Un hombre culto debe estar informado de cuanto sucede en el mundo. No lea periódicos"

Noches en vela

Varios días lleva C. inquieta y molesta. Sólo se consuela cuando la tenemos en brazos y, en ocasiones, ni así. Le cuesta conciliar el sueño y al rato se despierta, y vuelve a la queja y al desvelo.

¿Por qué llora la niña? ¿Por qué se queja? Y, en mitad de la noche, juegas, ingenuo, a ser poeta...

. . . .

Ignorancia

De noche, cuando lloras, nos sentimos
inseguros. Dudamos ¿Qué será?
¿Los dientes, tendrá frío, acaso fiebre?,
En la álgida penumbra te tocamos
y abrazando tu voz, que es un misterio,
hallamos conmovidos que, a pesar
de querer aprehender todos tus días,
apenas sí sabemos nada tuyo.

El sentido arácnido

En ocasiones, desearía tener ese sentido arácnido que posee Peter Parker. Ya sabes, que un zumbido irrumpa en tu cabeza y, tras un primer sobresalto, ponerte en guardia ante la llegada del anunciado peligro.



En ocasiones, ya sabes.

Batallas

Vengo de desertar de Bouvines o de pelear en Midway,
vengo de la victoria o de la cobardía.

Éstos son los dos primeros versos del poema de Luis Alberto de Cuenca titulado Regreso e incluido en su libro, "La caja de Plata".

Ignoro con qué humor regresarían los desertores y combatientes de aquellas dos batallas, pero puestos a desertar y regresar a casa, yo desertaría del Dnieper.





. . . .

Dándole vueltas a los versos de ayer:

Tengo que agradeceros hijas mías
todas aquellas cosas que se fueron,
.................................................... ¿cuándo?
películas de culto en japonés,
la montaña que ya nunca hollaremos,
y el último concierto de Los tal.
Gracias doy hijas mías, por llegar
cuando ya comenzábamos a ser
............................................................ ¿qué?

La fontanería, ese misterio

Llego el fontanero a última hora de la tarde. Venía para ver si los malos olores que padecemos desde hace unos días se deben a averías en nuestra casa o a la humedad que nos ha regalado el vecino. Abrimos la puerta y...¡oh, maravilla!,¡oh, milagro!, los olores (¿qué olores?) han desaparecido... Las bajantes y tuberías, ese gran misterio.

Pero, a quién no le ha ocurrido que, llegando la grúa: "El coche no arranca, será la batería...", gire la llave el silencioso gruista y el coche, cobarde y traidor, ruja como un león.

. . .

Cavilando, surgieron un par de versos que podían seguir a, tengo que dar las gracias a mis hijas

por todas esas cosas que no haremos

por el monte que ya no subiremos

Silbo

El músico llega silbando hasta la parada. El músico no se suma a la fila de esperadores que, con vulgar paciencia, aguardan al autobús. El músico, como buen artista, se mantiene alejado unos metros, dando un extraño y ajetreado paseo y continúa silbando... ¿Qué silba el musico? Pues, la verdad, una música bastante corriente: el Adagio de Albinoni.

* * * *

Con respecto al Sexto, ¿cuanto más te rascas, más pica?

Continúen. Ejercicio I

Dispusiste tu hogar junto a aquel pecho
y nombras nombres hoy, que siendo extraños,
como ése de “la madre de mis hijos”,
constituyen ya un hito en tu camino.

. . . . .

Que tu silencio amanse los contentos.
.....

Quizá lo importante sea, simplemente, hacer. Hacer con fe, hacer por el propio gusto, por ser el que se es.