de frío invierno,
recordad a mi niño
que duerme al hielo.
Mañanas dichosas
del frío diciembre,
aunque el cielo os siembre
de flores y rosas,
pues sois rigurosas
y Dios es tierno,
recordad a mi niño,
que duerme al hielo.
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| Ilustración de Antonio Saura |
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| Lynda Shalagan, Árbol de otoño, 2007 |
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| John Currin |
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| Edouard Vuillard, Niños en una habitación, 1909 |
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| Pierre Bonnard, El postre, 1940 |
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| Daniel d'Ors, Horse, 2006 (http://www.danieldors.com/) |

Hay en la manigua caminos circulares que, misteriosamente, no dan vueltas sobre sí mismos. En sus arenas, dibuja Juan E. Martín ( http://loscaminoscirculares.blogspot.com/) hermosos veros como, por ejemplo, Siracusa.
Por ejemplo Siracusa (publicado el 8/1/2011)
Ir a algún lugar
donde no haya nada nuestro,
donde no existan recuerdos
y la vida sea un desierto que cultivar.
Un nuevo día,
un mundo nuevo,
da igual más bello
da igual más feo.
Por ejemplo,Siracusa
se me ocurre
y no se nada que pueda encontrarme allí,
si acaso ruinas,
tal vez un lago,
seguro un bar
o una casa con jardín y con dos perros
a los que llamar Amor y Calor
como se titulan dos libros de poemas de Vilas
Rembrandt, Muchacha en la ventana, 1645
Ignacio Zuloaga, La víctima de la fiesta, 1910
Bartholomeus Spranger, Venus en la fragua de Vulcano, 1610
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Rosales apareciendo, JM Mora Fandos ©

